En el caso de la sede de gobierno y su vecina El Alto, la decisión fue asumida por los representantes de los maestros en una asamblea realizada la tarde de ayer en la Casa Social del Maestro. El ejecutivo del magisterio paceño, José Luis Álvarez, informó que en la reunión se ratificó el rechazo a la Ley Avelino Siñani-Elizardo Pérez y su currículo. Para la dirigencia del sector, el nuevo modelo es “retrógrado”.
“Por ello, hemos decidido no implementar la malla curricular, aparte de no conocerla; no queremos improvisar, como hace el Ministerio de Educación, en la aplicación de su nuevo modelo”, manifestó Álvarez. Anunció que convocarán a los maestros a una reunión el viernes 10 de febrero con la idea de perfilar las medidas de protesta que asumirán en contra del sistema educativo.
Por su parte, el dirigente del magisterio de El Alto, Luis Copeticona, confirmó que los maestros de esa urbe también retornan a clases, pero condicionados a retomar las medidas de presión en lo posterior. Por su lado, Gustavo Sánchez, dirigente del magisterio cochabambino, confirmó que retornarán a clases, pero “vamos a evaluar el programa escolar el jueves”.
El ministro de Educación, Roberto Aguilar, ratificó ayer —en declaraciones a radio Panamericana— la implementación gradual y paulatina del currículo y criticó la actitud asumida por “algunos dirigentes trotskistas”. El plan gubernamental consiste en aplicar el nuevo modelo en los primeros cursos de Primaria y Secundaria. Para ello, se anunció la capacitación de los docentes de estos cursos, proceso que “será continuo y durante todo el año”, según explicó el propio Aguilar.
El cambio sí tiene el apoyo de las confederaciones urbana y rural. El ejecutivo de la Confederación Nacional de Maestros Urbanos, Federico Pinaya, coincidió con Aguilar que el rechazo es de los sectores “trotskistas que se oponen a todas las propuestas y no proponen nada a cambio”.
En tanto que Pedro Tanaca, de la Confederación Nacional de Maestros Rurales, aseguró que el sector está listo para reanudar las labores escolares. “Los maestros que protestan son sólo un pequeño sector”. En el caso de La Paz, la dirigencia del área urbana afirma que el cambio afectará la carga horaria, por lo que temen despidos. Asimismo, critican que se aplique la reforma sin contar con la infraestructura necesaria.
Rechazo. Desde Oruro, según reportes de canales de Tv, el magisterio urbano expresó su rechazo al nuevo modelo y anunció que desconoce a las autoridades departamentales de Educación, que no socializaron la norma. Un representante del sector en la capital, Sucre, también condenó que las bases no conozcan el documento y dijo que aplicarlo requiere de un proceso intensivo de capacitación.
En Tarija, otro dirigente de la ciudad confirmó el inicio de clases tal como lo estableció el Gobierno, siempre y cuando se suspenda la implementación del nuevo diseño curricular, porque no fue consensuado.
Último día de inscripción
Cupos
Algunos padres aún hicieron filas con la esperanza de lograr un cupo para sus hijos en ciertos establecimientos.
Confusión
Juntas escolares coincidieron en que en el último día de inscripción existía confusión en papás por los cambios.
Piden adecuar depósitos como aula
Las juntas de padres de familia proponen adecuar depósitos y salas de reuniones para convertirlas en aulas, a fin de implementar el nuevo currículo escolar. La Alcaldía de La Paz dice que no es lo más conveniente para los estudiantes.
“Queremos que los lugares que están funcionando como depósitos, salas de té o reuniones de maestros e incluso bibliotecas sean adecuados como aulas para implementar la división de los nuevos niveles y solucionar en algo los problemas de infraestructura”, dijo el presidente de la Junta Nacional de Padres de familia, Franklin Gutiérrez.
Esta propuesta surge tras el informe que señala que al menos el 80% del total de colegios de todo el país aplicó la división de los seis cursos de Primaria y seis de Secundaria sin contar con la infraestructura.
Gutiérrez aseguró que la idea ya fue propuesta en primera instancia al alcalde Luis Revilla, en la ciudad de La Paz. Sin embargo, el Burgomaestre señaló ayer a La Razón que no es posible adecuar estos ambientes en aulas, porque con ello se “improvisaría”, teniendo en cuenta que estos lugares no reúnen las condiciones necesarias para albergar a los estudiantes en la nueva gestión.
Decomisan más material escolar falsificado
En un operativo realizado ayer se decomisaron 20 cajas de marcadores falsificados, que podrían tener plomo, informó el intendente municipal, Mauricio Ruiz. Hasta la fecha ya suman 2.300 cajas de lápices incautadas. El control se realizó en calles donde se comercializa diferente tipo de material escolar, como La Tablada, el pasaje Ortega y adyacentes del macro Max Paredes.
Los materiales decomisados por los operativos podrían poseer plomo, un elemento que al tener contacto con el escolar o estudiante le ocasionaría problemas en la procreación, explicó el responsable de defensa al consumidor, Carlos Díaz.
“Es muy probable que en estos materiales falsificados haya elementos químicos muy fuertes como el plomo y cromatos, que al ingresar al organismo podrían producir daños irreversibles”, dijo. Asimismo, el experto en toxicidad explicó que el contacto con estos elementos daña el sistema nervioso central, las vías respiratorias y consecuencias en la procreación, pues los hijos podrían nacer con deficiencias físicas.
El problema también se presentaría en las plastilinas que son utilizadas por los niños de grado inicial, debido a que su elaboración puede contar con elementos pesados y altamente activos. A raíz de esta sospecha, el material decomisado fue sometido a un proceso de análisis en los laboratorios y las autoridades aguardan los resultados, teniendo en cuenta la gravedad del peligro.
“Desconocemos la procedencia, pero si los análisis dan positivo a los efectos tóxicos estamos hablando de un delito por atentar contra la salud de la población”, dijo. Varias instancias departamentales y municipales realizaron operativos de control a los materiales escolares, tras la denuncia de la empresa Lara Bisch.// la Razón
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