Gabriela Sotomayor: “Hay que darles voz a los que nunca la tuvieron”

La autoridad educativa considera que el Estado, con apoyo de la ciudadanía, debe organizar los debates sobre la propuesta de elaborar una ley de comunicación y debatir la actual Ley de Imprenta.Algunos medios de comunicación han expresado una postura política clara que ocasionó su descrédito y que vivamos en este momento un tiempo de crisis de medios.

ENTREVISTA

Gabriela Sotomayor, directora de Comunicación Social de la Universidad Mayor de San AndrésLa falta de caminos, la variedad de lenguas originarias y la diversidad de medios, que con sus posturas políticas han llevado a su descrédito mediático, son algunos conceptos que dio la directora de la carrera de Comunicación Social de la Universidad Mayor de San Andrés (UMSA), Gabriela Sotomayor, en entrevista con Cambio y a propósito del debate sobre la normativa para elaborar una nueva ley de comunicación.

UMSA Bolivia—Desde el punto de vista de directora de la carrera de Comunicación ¿cómo ve la labor de los medios de información en el país?

—La opinión que voy a expresar no es personal, tiene un criterio que recoge los diagnósticos realizados por importantes comunicadores, como el doctor Luis Ramiro Beltrán, Raúl Rivadeneira y otros (estudiosos), quienes señalaron que los niveles de incomunicación en Bolivia son altos por distintas razones. Desde la realidad topográfica del país, que impide que tengamos la cantidad de caminos(...), hasta la variedad lingüística que tenemos y que sin duda enriquece una cultura, pero limita los niveles comunicacionales.

—¿Será que estos medios masivos están cumpliendo el rol que deben desempeñar en la sociedad?

—Respecto al rol de los medios de comunicación, clásicamente se les asignaron los de informar, educar y entretener. Bueno sabemos que la mayoría de los medios se ocupan básicamente de informar y entretener. (...) Y en el tema de información, hay también otros estudios (...) de la carrera de Comunicación que nos revelan que en el tema informativo tampoco se llega a satisfacer la demanda de la población porque habitualmente se hace cobertura de notas sueltas, no se hace seguimiento, no hay profundidad en la investigación, ya sea por las presiones o el estilo de trabajo en los medios (...) y más bien apostamos por la cantidad. Esta situación nos lleva a añadir el tema de la postura política clara que han expresado algunos medios de comunicación y ha llevado a los medios al descrédito, a que vivamos este momento de crisis de medios de comunicación. Crisis mediática y no sólo en Bolivia, sino también en otros países como EEUU. Creo que es el boom (moda) internacional y el panorama nacional que ha hecho que los medios de comunicación ya no tengan el rol fundamental y entren en descrédito muchos medios de comunicación en nuestro país.

—¿Cuál su opinión sobre la Ley de Imprenta?

—Hace unas semanas se ha planteado en la agenda pública la Ley de Imprenta, que evidentemente es una ley muy antigua, planteada por Franz Tamayo, Sánchez Bustamante y otros que fueron los fundadores de la Asociación de Periodistas, que han tratado de proteger el manejo de la información como derecho fundamental.

Dado el avance tecnológico, sin duda queda desactualizada, además que es una ley-reglamento que incluye sanciones que han quedado totalmente caducas.

—¿Cuál la importancia de nuevas políticas comunicacionales?

—Es muy importante que el pueblo boliviano y no sólo los comunicadores presten atención a la realidad comunicacional y tratemos de cambiar no sólo la parte de las leyes, que es un aspecto del problema, porque en la medida en que los medios, los procesos, las leyes, los ciudadanos nos embarquemos en un línea, una política comunicacional, sin duda todos los aspectos que hacen a la vida ciudadana van a mejorar, porque la comunicación es un hecho transversal en el ser humano y por eso es importante que se organicen mesas de diálogo, talleres y foros para iniciar el debate.

—¿Quiénes deberían participar en las mesas de debate?

—Tienen que participar los representantes de la ciudadanía y en lo posible hacerlo de la manera más amplia (...). Hay que darles voz a los que nunca tuvieron voz, hay que buscar representaciones y hacerlo en todos los espacios, de modo que podamos sacar una percepción de lo que está buscando la ciudadanía de sus demandas más importantes.

No conozco otra mejor forma de organizarse que sentarse a dialogar con la gente con realismo, honestidad y que la gente sea la que haga su diagnóstico, si los medios están cumpliendo con la expectativa de información y si los públicos son exigentes en la calidad de información.

—¿Cómo se deben tratar las propuestas para la normativa?

—Creo que se debe abordar todo el tema comunicacional como un sistema de normas, teniendo como paraguas el paradigma de la Ley de Imprenta, bajo los principios que maneja la ley. Tal vez sea necesario una ley de medios específicamente, que vaya vinculada a una política comunicacional del país, después hay que ver si estas normas se adaptan a la Ley de Telecomunicaciones, al manejo del espectro electromagnético, vinculado también a los procesos, a la formación también, es un todo. No podemos ver nada aisladamente y todo tiene que sincronizar.

—¿Quién o quiénes serían los más indicados en la organización para los encuentros?

—El Estado tiene un rol que nadie puede suplir. Tiene que ser el Ejecutivo, y si esto se quiere politizar o distorsionar como muchas de las cosas, creo que la ciudadanía debe ser la que sea primera en protegerla, mediante la concienciación a la gente. En la medida en que mejoremos nuestro relacionamiento comunicacional se pueden mejorar las relaciones en las familias, barrios y ciudades, es un circuito que va creciendo y podemos mejorar las relaciones comunicacionales como país.

Es un desafío también para las propias universidades, las organizaciones públicas y privadas, que no sea un tema que sólo se los convoque a los directores de medios, que son una parte, pero el resto son los receptores.

—¿Cuál su opinión sobre los derechos laborales de los trabajadores de la prensa?

—En los medios de comunicación, en muchos casos, se gana menos que el salario básico y estamos hablando de profesionales con formación en educación superior. Muchas veces no se tiene seguro de salud, se hace contratos y no se respeta la indemnización y no hay garantías.

Los medios que trabajan en vidriera, también tienen que ser transparentes y tienen que regularizar y respetar todas las normas que protegen al trabajador.

—¿Cuál es el tratamiento de las pasantías, prácticas guiadas y otros de los estudiantes?

—Cada día llegan a la Carrera alrededor de 10 solicitudes de pasantía, y en la carrera de Comunicación no es un requisito académico, sino una oportunidad de práctica.

Tengo la impresión que muchas empresas mandan estas convocatorias de pasantías porque prefieren no pagar, ni siquiera el salario mínimo, sino no pagar y entonces nace una nueva clase de esclavitud. Debiera abordarse el derecho laboral, porque es una buena oportunidad de hacer sus prácticas, pero no en reemplazo de la demanda laboral de profesionales.// Cambio

Publicar un comentario

0 Comentarios